Mini quiches de gruyère y puerro: un paraíso de mantequilla y queso en bocados pequeños
Estas pequeñas quiches doradas son pura elegancia en miniatura: una masa hojaldrada con una suave crema pastelera, puerros dulces salteados y un Gruyère con sabor a nuez que se derrite en cada bocado. Perfectas para mesas de brunch, baby showers, desayunos festivos o para cuando quieras algo sofisticado que desaparezca en dos bocados.
Un rápido giro del rallador de queso con manivela le dará tiras de Gruyère esponjosas y perfectamente uniformes que se derriten de manera hermosa y uniforme, sin grumos ni complicaciones. 
🧈 Ingredientes (rinde 12 mini quiches o 24 en un molde para mini muffins)
1 lámina de masa quebrada o de hojaldre preparada (o casera si te sientes elegante)
1 cucharada de mantequilla + 1 cucharadita de aceite de oliva
2 puerros medianos, solo las partes blancas y verde claro, cortados a lo largo por la mitad y en rodajas finas
3 huevos grandes
¾ taza de crema espesa (o mitad y mitad para una versión más ligera)
4 oz de queso Gruyère, recién rallado
¼ cucharadita de nuez moscada (recién rallada si es posible)
Sal y pimienta negra recién molida
Hojas de tomillo fresco (guarnición opcional)
🍃 Paso a paso: Perfección hojaldrada y con queso
Enrolle y corte la masa
Extiende la masa ligeramente más fina sobre una superficie enharinada. Corta círculos con un cortador de galletas de 8 a 10 cm y presiónalos suavemente en un molde para mini muffins o tartaletas untado con mantequilla. Refrigera mientras preparas el relleno.
Ablandar los puerros
Derrite la mantequilla con aceite de oliva en una sartén a fuego medio-bajo. Agrega los puerros, una pizca de sal y cocina a fuego lento hasta que estén tiernos y dulces, pero sin dorarse. Deja enfriar un poco.
Hacer las natillas
En un bol, bata los huevos, la nata, la nuez moscada, una pizca generosa de sal y abundante pimienta negra hasta obtener una mezcla homogénea.
Destruye la estrella
Usando su rallador de queso rotatorio Geedel con la cuchilla fina o gruesa, triture rápidamente el Gruyère en montones livianos y esponjosos, listos para derretirse como un sueño.
Armar
Coloque una cucharadita de puerros en cada molde. Espolvoree generosamente con queso gruyère rallado. Vierta la crema pastelera con cuidado hasta casi llenarlos (deje un pequeño espacio para que se inflen).
Hornear y dorar
Hornee a 190 °C (375 °F) hasta que la masa esté dorada y el centro esté firme, apenas se mueva. Deje enfriar 5 minutos en el molde y luego transfiera a una rejilla.
Servir caliente o a temperatura ambiente.
Espolvorea con hojas frescas de tomillo y una pizca extra de pimienta. Observa cómo desaparecen.
🧀 Consejos y giros
Preparación con anticipación: hornee con un día de anticipación, refrigere y luego caliente a 325 °F durante 8 a 10 minutos.
Un placer para los vegetarianos: cambia los puerros por espinacas o champiñones.
Una mejora elegante: agregue un poco de miel de trufa encima antes de servir.
Apto para congelador: congele las quiches horneadas y luego caliéntelas directamente desde congeladas.
🥧 Conclusión: Quiches diminutas, ¡un auténtico wow!
Estas mini quiches de gruyère y puerro demuestran que lo mejor viene en envases pequeños. Una base de mantequilla, una crema pastelera cremosa y ese irresistible toque de nueces del gruyère: todo, mejor sin esfuerzo con el queso rallado perfecto de tu rallador de queso.





