Tazas de galletas con chispas de chocolate americanas
Vasitos de galleta con capacidad para helado: ¡qué divertidos! El picador de alimentos Geedel corta rápidamente la mantequilla fría en gránulos crujientes y el chocolate en trozos derretidos, mientras que el picador de cebolla tritura fácilmente las nueces hasta obtener la textura perfecta. En solo 30 minutos, puedes hornear estos vasitos de galleta crujientes por fuera y tiernos por dentro. Cada bocado libera una explosión de chocolate derretido, y al rellenarlos con una bola de helado de vainilla, ¡el contraste de calor y frío es una auténtica delicia para una tarde americana!
Ingredientes
- 120 g de harina de repostería (harina baja en proteínas)
- 80 g de mantequilla sin sal (fría)
- 60 g de chocolate negro (cortado en trozos)
- 50 g de azúcar blanco
- 30 g de azúcar moreno
- 1 huevo
- ¼ cucharadita de polvo para hornear
- Una pizca de sal
- 30 g de nueces trituradas
- 100g de helado de vainilla (para servir)
- 20 g de salsa de chocolate (para rociar)
Instrucciones
1. Cortar la mantequilla
Corte la mantequilla fría en cubos pequeños y colóquela en la picadora. Presione tres veces hasta que la mantequilla forme gránulos uniformes del tamaño de un guisante.
En un tazón, combine los gránulos de mantequilla con la harina para repostería, el polvo para hornear y la sal. Con las yemas de los dedos, frote la mezcla hasta obtener migas gruesas. Los trozos uniformes de mantequilla garantizan una corteza crujiente y hojaldrada en lugar de una masa densa.

2. Picar el chocolate y las nueces
Coloque los trozos de chocolate negro en la picadora de verduras con la cuchilla para cortar en cubitos. Presione una vez para crear trozos pequeños y uniformes; estos se derretirán formando bolitas pegajosas dentro de las galletas horneadas.
Rompa las mitades de las nueces en trozos y colóquelas en la picadora de cebolla. Presione dos veces para obtener una mezcla de trozos finos y gruesos, añadiendo un delicioso toque crujiente y sabor a nuez a cada bocado.

3. Hornear y ensamblar
En un bol aparte, bate el azúcar blanco, el azúcar moreno y el huevo hasta obtener una mezcla ligera y esponjosa. Incorpora suavemente la mezcla de harina y mantequilla hasta que esté bien integrada. Luego, incorpora el chocolate y los trozos de nuez.
Engrasa ligeramente un molde para muffins. Divide la masa en 4 porciones y presiona cada una formando un hueco (de unos 0,5 cm de grosor en el fondo y los lados para evitar que se rompan).
Hornear a 170 °C (340 °F) durante unos 20 minutos, hasta que esté dorado. Dejar enfriar completamente antes de desmoldar.
Llena cada vasito de galleta con una bola de helado de vainilla y rocía con salsa de chocolate. El primer bocado te ofrece una galleta crujiente, chocolate derretido y crema fría: ¡una verdadera celebración de texturas!

Conclusión
La magia de estas tazas de galleta reside en su envase comestible y el chocolate cremoso que esconden. Con Geedel, puedes crear este postre espectacular en tan solo 30 minutos. Rellenas de helado, esta combinación de calor y frío es simplemente irresistible. Cuatro tazas son perfectas para compartir con chocolate caliente: ¡un capricho realmente reconfortante!




